3ª Etapa (18/08) Zafra-Merida.
Datos de la etapa:
Distancia recorrida: 78 km
Tiempo de pedaleo: 4:30 Horas
Media: 17,3 Km/h
Salida: 8:00
Llegada: 13:30
La salida de Zafra se hace en dirección al alto de San Cristóbal. La cuesta es empinada y recién levantado y con el estomago vacío se hace dura; pasado el alto, el resto de la etapa es bastante llano y con pocas sombras, pues atravesamos zonas de viñedos y la vegetación es baja.
No solo la tierra era rojiza.
El camino es bueno, de tierra rojiza y solo se puede complicar en época de lluvias, donde el barro nos dejaría clavados en el camino, pero afortunadamente no es el caso. Desde Villafranca de los Barros a Torremejia, se atraviesa una distancia de 27 km sin ningún pueblo ni fuente a la vista. Los escasos peregrinos que los encontramos haciendo el camino andando nos merecen todo nuestro respeto, pues con las condiciones de calor y escasez de agua nos parece una pasada completar una sola etapa.
En Zafra nos recomendaron ir al Albergue Juvenil en lugar del Albergue Municipal, pues la condiciones de este último no son las más adecuadas. El Albergue Juvenil está al final de un polígono industrial que se extiende paralelo al río, después de unos 4 km llegamos y nos encontramos con la decepción de no poder quedarnos pues esperan la llegada de un grupo de escolares y está completo.
Con la mala leche reflejada en nuestras caras nos damos media vuelta para dirigirnos al Albergue municipal. De camino nos encontramos a Damia y después de darle la mala noticia decide venirse con nosotros.
El puente Romano.
Entramos en Merida cruzando el Guadiana por su puente romano, el más largo del imperio. Nicola está al borde del éxtasis y proclama orgulloso “la mano di Roma”. Nada más cruzar el puente nos encontramos con una escultura donada por la ciudad de Roma a Merida en la que se representa a la loba amamantando a Romulo y Remo. Nicola nos cuenta que la ciudad de Merida se fundo como sitio de retiro de los grandes militares en agradecimiento a sus años de dedicación al Imperio.
Todo lo que nos habían contado sobre el albergue se nos muestra como cruda realidad. Se trata de un antiguo molino situado en un entorno precioso, pero muy mal conservado, la limpieza en su interior es nula y las duchas son de lo más cutre que nos encontariamos en todo el camino, además al tratarse de un edificio de una sola planta, hace un calor insoportable.
Alguna joyas de Merida.
Después de asearnos y cambiarnos aprovechamos para ver la ciudad. Con un pase de 10 € se pueden visitar todo el conjunto monumental. A nosotros solo nos dio tiempo de ver la Basílica de Santa Eulalia, el Circo Romano, la Casa del Anfiteatro, donde están los mejores mosaicos, y el Anfiteatro y Teatro Romano, este último es el más espectacular, pues está muy bien conservado. Es el único edificio que ha vuelto a cumplir su función original, celebrándose en él, desde 1993, el Festival de Teatro Clásico. La tarde que lo visitamos, lo estaban preparando para la representación de Medea.
Aquí estamos todos los que nos juntamos.De Iz. a Dch.:
Damia, Julio, Nicola, Antonio, Ramón, Jose y Danielle.
Durante la tarde conocemos a Danielle, otro italiano compañero de Nicola, que salió de Sevilla un día después que nosotros. Tienen pensado llegar a Santiago por el camino Sanabrés sobre el 25 de agosto, por lo que a partir de mañana les esperan 110 km diarios para poder llegar a tiempo. También conocemos a Anett, una alemana que está haciendo la vía andando y que según nos cuenta ha recorrido 44 km en la etapa de hoy, solo de pensarlo me entran sudores.
Volvemos al albergue después de cenar todos juntos, al entrar en el “barracón” nos damos cuenta que la temperatura apenas ha bajado, el termómetro marca 34ºC en el interior, va a ser una noche muy larga….