Un paseo por navarra.

Precioso día para dar una vuelta con la Niña. Navarra es muy bonito y me gusta dar paseos por esas tierras. Ademas ese día estuve con los amigos en la casa que uno de ellos tiene en Carcar, un pueblecito de Navarra muy bonito y con unas fiestas animadas. Lo pasamos muy bien ya llevamos un par de años yendo a unas comidas populares que hacen en el pueblo, y de paso a visitar la bodega de vino que hay en el pueblo.

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Y una vez en Navarra visitar algunos de sus pueblos.

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Primer viaje de La Niña.

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El primer viaje de La Niña ha sido a Formigal, a la BMWRiders. No ha podido tener mejor estreno con migo, aunque el primer día siendo mía tuvimos un percance, que gracias a  BMW DASMOTO que es donde la compre, todo quedo en una mera anécdota. El viaje fue fenomenal, salimos de Dasmoto dirección Goizueta, para seguir por Leitza, donde nos pusimos los trajes de agua, porque parecía  que llovería, y así fue. La lluvia nos acompaño asta pasado un buen rato después de Pamplona, pero después de la cena nos volvió a visitar para acompañarnos asta llegar a Formigal. La vuelta la hice solo, pero la disfrute un montón a pesar del diluvio que me callo encima. Un viaje maravilloso.

Presentación.

 

Diario de una aventura. Vía de la Plata agosto 2009.

Antes que nada comenzare por las presentaciones, los protagonistas de esta aventura somos Julio, José, Antonio y un servidor. Diríamos que todo empezó a comienzos del mes de junio, cuando me comentaron la posibilidad de realizar la Vía de la Plata en bici, saliendo de Sevilla y terminando el Astorga. Después de haber recorrido el camino de Santiago tradicional dos veces, esta nueva ruta sonaba interesante. A favor teníamos un camino mucho menos transitado, muy factible de hacer en bici y con el interés de lo desconocido. En contra solo estaba las fechas en las que lo íbamos a realizar, por temas laborales saldríamos el 15 de agosto para Sevilla, y teniendo en cuenta el recorrido nuestro mayor enemigo seria sin ninguna duda el calor.

Estos son los cuatro valientes que hicieron la ruta.

Estos son los cuatro valientes que hicieron la ruta.

Primer día.

1ª Etapa (16/08) Sevilla-Almadén de la Plata.

Datos de la etapa:

Distancia recorrida: 70,5 km

Tiempo de pedaleo: 4:40 horas

Media: 15 Km/h

Hora de salida: 7:20

Hora de llegada: 13:30

Comienza la aventura.. No he dormido demasiado, entre los nervios y los mojitos de la noche anterior apenas 4 horas. Salimos del Albergue Triana, en el cual hemos pasado la noche, por 14 €/persona nos dieron una habitación cuádruple con aire acondicionado. Se trata de un albergue para mochileros, utilizado sobre todo por turistas extranjeros de paso por la ciudad.

Amaneciendo en Sevilla.

Amaneciendo en Sevilla.

Pasadas las 7 de la mañana, con las primeras luces de la mañana nos despedimos de Sevilla, ya desde Triana comenzamos a seguir las fechas amarillas que nos acompañaran todo el camino. Pasamos por Santiponce, dejando atrás las ruinas de Itálica, el camino es bueno y todavía sin pendiente.

Al llegar a Guillena paramos a desayunar, Colacao y tostada con tomate, aceite y jamón por 2 €, que más se puede pedir?.

A partir de este punto comenzamos a ganar altura, primero durante un tramo de carretera y después al salirnos a una preciosa pista entre encinares. Hay un tramo en el que la pista se pone un poco trialera, pero sin llegar a hacernos bajar de la bici. Es domingo y se acaba de abrir la veda, oímos bastantes tiros y nos cruzamos con un numeroso grupo de cazadores con sus perros.

Parada en la sombra.

Parada en la sombra.

Llegamos a Castilblanco de los Arroyos y seguimos por carretera durante unos 15 kilómetros, se trata de una carretera bien asfaltada, pero con muy poco trafico. Lo cual se agradece. Es mediodía y el calor comienza a apretar, llegamos a las puertas del Berrocal, un parque forestal precioso, por lo que oímos después, pero bastante duro de atravesar sobre todo en la subida al Calvario y donde es fácil perderse. Nosotros decidimos la opción más cómoda, subir el Calvario siguiendo por carretera, en este caso no hay apenas dificultad y tras una suave bajada se llega a Almadén de la Plata.

El albergue está muy bien, amplio, limpio y con un patio interior donde poder guardar las bicis.

Volviendo de la piscina.

Volviendo de la piscina.

Aprovechamos la tarde para lavar la ropa y descansar en la piscina, por cierto en el mismo bar de la piscina se come muy bien y barato.

Para cenar no encontramos ningún bar abierto, es domingo de feria y casi todo el mundo está de fiesta, hasta los bares. Nos bajamos hasta el recinto ferial y aprovechamos para cenar en una típica caseta.

Ya entrada la noche, cuando volvíamos al albergue, nos encontramos en la puerta un Patrol de la Guardia Civil y una furgoneta de Urgencias, me acerco con curiosidad y descubro que se traen a dos peregrinos en bici. Se trata de una pareja de Irun (Manu y Soraya) que se han perdido en el Berrocal y además han tenido un problema mecánico con una de las bicis.

Segundo día.

2ª Etapa (17/08) Almadén de la Plata-Zafra.

Datos de la etapa:

Distancia recorrida: 87 km

Tiempo de pedaleo: 5:30 horas

Media: 15,6 Km/h

Hora de salida: 7:15

Hora de llegada: 16:00

Los cerdos, pero Ibéricos.

Los cerdos, pero Ibéricos.

Esta mañana se nos une al grupo Nicola, un italiano de 55 años que nos dejaría un gran recuerdo. Salimos a las 7 y cuarto con intención de desayunar en el siguiente pueblo, El Real de la Jara, al que se llega por una carretera secundaria poco transitada y con innumerables fincas de cerdos ibéricos a los lados. A partir del Real cogemos una pista y enseguida pasamos por en Castillo de la Torres, justo en la linde que separa Andalucia de Extremadura. El castillo es de origen romano, pero le dieron la forma que conserva ahora los árabes, a comienzos del siglo XIII fue conquistado por los caballeros de la orden de Santiago. Seguimos por pista hasta cruzarnos con la N-630, por la que se sube a Monesterio. Es un repecho de unos 4 km en el que Nicola nos demuestra que a pesar de la edad está en plena forma, comienza tirando del grupo y apenas deja que José se ponga a su altura, solo a falta de 1 km le conseguimos dejar atrás Julio, José y yo. Al llegar al pueblo en cuanto nos da alcance nos dice entre jadeos “si pero yo 55 y vosotros 30 y tantos”.

Parada en Monesterio para repostar algo.

Parada en Monesterio para repostar algo.

Monesterio bien merece una parada. Nos sentamos en la terraza de uno de sus muchos bares para almorzar un plato de su afamado jamón ibérico. Entre jarras de cerveza, al final caen un plato de jamón, otro de queso (por cortesía de Nicola) y un bote de una especie de paté de ibérico muy bueno. Nicola se adapta fácil al grupo y a nuestras costumbres y ya nos bautiza como el equipo “Ítalo-españolo”. Cuando estábamos dando cuenta del plato de jamón aparece Damia, un catalán de Manresa, con pocas pintas de ciclista, que conocimos la noche anterior en Almadén.

El primer pinchazo, de Julio. (claro, no tiene tubeless).

El primer pinchazo, de Julio. (claro, no tiene tubeless).

Al final la parada en el pueblo ha sido más larga de lo deseado y se nos ha ido el tiempo, nos dan más de las 12 y todavía queda la mitad de la etapa, antes de salir llenamos bien nuestros botellines con agua y hielo. Es increíble como se calienta el agua en apenas media hora , por lo que siempre que podemos metemos hielos. Atravesamos Monesterio y cogemos pista para adentrarnos en la Dehesa, a los pocos kilómetros sufrimos el primer pinchazo, es la rueda trasera de Julio, parada de 5 minutos a la sombra de una encina y a seguir.

Pasamos por Fuente de Cantos y Calzadilla de Barros, a partir de aquí el paisaje cambia, se hace más extremo, con pocas sombras y terreno árido.

Con un sol de justicia y el termómetro de Nicola marcando 43 grados , llegamos a Zafra. Son las cuatro de la tarde, nos alojamos en el Albergue Turístico Alba-Plata, situado en un antiguo convento, sus gruesos muros hacen que este fresco en el interior aun con 40 grados en el exterior.

Parada en el Dia para comprar algo de comida y bebida.

Parada en el Dia para comprar algo de comida y bebida.

Entre instalarnos, ducharnos y demás nos dan las cinco y a esas horas no hay nada abierto para comer, por aquí entre las cuatro y la seis no queda abierto ni el Telepizza, la siesta es sagrada. Al final no nos queda otra que pasar por el Dia% y comprar material para hacernos unos buenos bocatas.

Ya cayendo la tarde salimos a visitar la ciudad, merece la pena pasearse por las entrañables Plaza Grande y Plaza Chica y tomarse unas cervezas en buena compañía. Solo es el segundo día y ya somos dos más para cenar, Nicola y Damia ya parecen del grupo.

Tercer día.

3ª Etapa (18/08) Zafra-Merida.

Datos de la etapa:

Distancia recorrida: 78 km

Tiempo de pedaleo: 4:30 Horas

Media: 17,3 Km/h

Salida: 8:00

Llegada: 13:30

La salida de Zafra se hace en dirección al alto de San Cristóbal. La cuesta es empinada y recién levantado y con el estomago vacío se hace dura; pasado el alto, el resto de la etapa es bastante llano y con pocas sombras, pues atravesamos zonas de viñedos y la vegetación es baja.

No solo la tierra era rojiza.

No solo la tierra era rojiza.

El camino es bueno, de tierra rojiza y solo se puede complicar en época de lluvias, donde el barro nos dejaría clavados en el camino, pero afortunadamente no es el caso. Desde Villafranca de los Barros a Torremejia, se atraviesa una distancia de 27 km sin ningún pueblo ni fuente a la vista. Los escasos peregrinos que los encontramos haciendo el camino andando nos merecen todo nuestro respeto, pues con las condiciones de calor y escasez de agua nos parece una pasada completar una sola etapa.

En Zafra nos recomendaron ir al Albergue Juvenil en lugar del Albergue Municipal, pues la condiciones de este último no son las más adecuadas. El Albergue Juvenil está al final de un polígono industrial que se extiende paralelo al río, después de unos 4 km llegamos y nos encontramos con la decepción de no poder quedarnos pues esperan la llegada de un grupo de escolares y está completo.

Con la mala leche reflejada en nuestras caras nos damos media vuelta para dirigirnos al Albergue municipal. De camino nos encontramos a Damia y después de darle la mala noticia decide venirse con nosotros.

El puente Romano.

El puente Romano.

Entramos en Merida cruzando el Guadiana por su puente romano, el más largo del imperio. Nicola está al borde del éxtasis y proclama orgulloso “la mano di Roma”. Nada más cruzar el puente nos encontramos con una escultura donada por la ciudad de Roma a Merida en la que se representa a la loba amamantando a Romulo y Remo. Nicola nos cuenta que la ciudad de Merida se fundo como sitio de retiro de los grandes militares en agradecimiento a sus años de dedicación al Imperio.

Todo lo que nos habían contado sobre el albergue se nos muestra como cruda realidad. Se trata de un antiguo molino situado en un entorno precioso, pero muy mal conservado, la limpieza en su interior es nula y las duchas son de lo más cutre que nos encontariamos en todo el camino, además al tratarse de un edificio de una sola planta, hace un calor insoportable.

Alguna joyas de Merida.

Alguna joyas de Merida.

Después de asearnos y cambiarnos aprovechamos para ver la ciudad. Con un pase de 10 € se pueden visitar todo el conjunto monumental. A nosotros solo nos dio tiempo de ver la Basílica de Santa Eulalia, el Circo Romano, la Casa del Anfiteatro, donde están los mejores mosaicos, y el Anfiteatro y Teatro Romano, este último es el más espectacular, pues está muy bien conservado. Es el único edificio que ha vuelto a cumplir su función original, celebrándose en él, desde 1993, el Festival de Teatro Clásico. La tarde que lo visitamos, lo estaban preparando para la representación de Medea.

Aquí estamos todos los que nos juntamos.De Iz. a Dch.: Damia, Julio, Nicola, Antonio, Ramón, Jose y Danielle.

Aquí estamos todos los que nos juntamos.De Iz. a Dch.:
Damia, Julio, Nicola, Antonio, Ramón, Jose y Danielle.

Durante la tarde conocemos a Danielle, otro italiano compañero de Nicola, que salió de Sevilla un día después que nosotros. Tienen pensado llegar a Santiago por el camino Sanabrés sobre el 25 de agosto, por lo que a partir de mañana les esperan 110 km diarios para poder llegar a tiempo. También conocemos a Anett, una alemana que está haciendo la vía andando y que según nos cuenta ha recorrido 44 km en la etapa de hoy, solo de pensarlo me entran sudores.

Volvemos al albergue después de cenar todos juntos, al entrar en el “barracón” nos damos cuenta que la temperatura apenas ha bajado, el termómetro marca 34ºC en el interior, va a ser una noche muy larga….

Cuarto día.

4ª Etapa (19/08) Merida-Caceres.

Datos de la etapa:

Distancia recorrida: 83 km

Tiempo de pedaleo: 5:10 horas

Media: 15,7 Km/h

Salida: 7:00

Llegada: 15:30

La salida de la ciudad se nos complica más de lo normal, entre la mala señalización y las obras, para cuando cogemos la carretera al embalse de Proserpina, llevamos ya 3 o 4 kilómetros extra.

Amaneciendo a la salida de Merida.

Amaneciendo a la salida de Merida.

Al final el retraso nos viene de perlas, pues nos coincide el amanecer con el paso por la vieja presa romana, ofreciéndonos unas vistas preciosas.

A partir de aquí, abandonamos la carretera para coger un camino que nos introduce en un espléndido bosque de encinas, es una pista blanquecina con zonas de arena que hacen que nuestras ruedas delanteras derrapen de lo lindo.

Desayunamos en Aljucen con los dos italianos y Damia que aparece al rato de llegar nosotros. Después de llenar el estomago seguimos marcha siempre por caminos entre encinares, hoy es el día que más cochinos ibéricos estamos viendo, muchos incluso en mitad el camino, sin ninguna valla de por medio. La verdad es que no nos hacen demasiado caso, ellos siguen a lo suyo comiendo bellotas.

Casa de don Antonio

Casa de don Antonio

Cruzamos el río Ayuela por un puente romano antes de entrar en Casas de Don Antonio, donde paramos a coger higos y moras. A partir de este pueblo la vegetación empieza a escasear, y por supuesto también las sombras. Casi a la altura del aeródromo de la Cerbera, en una zona de bajada, clavo la rueda delantera en una montonera de arena, dando con mis huesos en el suelo, el moratón del muslo me duraría un par de semanas. Más o menos por la misma zona se cayo también Nicola que venia un par de kilómetros por detrás.

Danielle y Nicola.

Danielle y Nicola.

Hoy será el último día que veamos a los italianos, pues nos comentan que en lugar de parar en Caceres, quieren seguir hasta el embalse de Alcántara.

Llegamos a Caceres sobre las 15:30 y nos alojamos en el albergue turístico de las Veletas, un sitio acogedor y muy bien preparado, desde donde el centro histórico nos queda a 5 minutos andando. Comemos en el Puchero, un restaurante situado en la Plaza Mayor que sirve comidas a cualquier hora, son las 16:30 y la paella entra de muerte. Cuando estamos a media comida aparece, como no, Damia, que nos tiene acostumbrados a llegar a destino tarde pero seguro. Aprovechamos lo que queda de tarde para visitar el casco histórico de la ciudad, según cuentan, el mejor conservado de todo el país.

Quinto día.

5ª Etapa (20/08) Caceres-Galisteo.

Datos de la etapa:

Distancia recorrida: 75 km

Tiempo de pedaleo: 5:00 horas

Media: 15 Km/h

Salida: 8:00

Llegada: 15:00

Desayunamos en el albergue y salimos a las 8:00 en dirección a Casar de Caceres, por desgracia pasamos por Casar demasiado temprano y las tiendas todavía están cerradas, por lo que nos quedamos sin probar su famosa torta de queso de oveja. Cruzamos el pueblo de sur a norte y cogemos una pista cómoda por terreno casi descendente.

Ramón Divirtiéndose.

Ramón Divirtiéndose.

A unos pocos kilómetros encontramos una de las zonas más divertidas del viaje, se trata de una sendero descendente, estrecho , con curvas y muchos cambios de nivel, mientras bajamos hacia el embalse de Alcántara. La diversión se acaba al enlazar con la carretera N-630, por la cual se atraviesa el embalse, son unos 5 kilómetros de carretera, de la cual se sale girando a la izquierda por una pista que sube con una fuerte pendiente que nos lleva hasta Cañaveral.

La fuerte pendiente.

La fuerte pendiente.

Paramos en este pueblo para almorzar y coger fuerzas antes de subir el puerto de los Castaños. Después de mucho pensarlo decidimos subirlo por carretera en lugar de la pista, por lo que al final no se hace nada duro. Desde arriba del puerto hasta Galisteo son 25 kilómetros sin un solo pueblo ni fuente donde refrescarnos. Atravesamos un precioso bosque de alcornoques, donde se pueden ver los troncos pelados después de la recolección de las cortezas, con las que luego fabricaran el corcho. Después de salir del bosque el camino sigue por zonas de poca sombra y los últimos kilómetros se hacen largos. Tras una larga subida por fin vemos el pueblo de Galisteo, son las 3 de la tarde y antes de buscar el albergue decidimos comer y refrescarnos. Justo a la entrada del pueblo encontramos el hostal-restaurante Los Inmigrantes, después de tragarnos un par de botellas de agua en la barra del bar, entramos al comedor y nos encontramos con los portugueses, tres chicos de Lisboa que salieron de Sevilla a la vez que nosotros. Tras dar cuenta de la comida, un menú de 8 € bastante bueno, teníamos intenciones de alojarnos en el albergue municipal, pero Nerea, la camarera de restaurante nos convence para quedarnos en el hostal, por 10 € por persona nos ofrece habitaciones dobles con aire acondicionado, todo un lujo, entre su sonrisa y lo bueno de la oferta no nos podemos negar.

Para variar la tarde es calurosa y no se nos ocurre una idea mejor que ponernos el bañador y darnos un merecido chapuzón en la piscina. Tumbados en el césped y a la sombrita nos dan las 8 de la tarde.

Parte de la muralla que rodea la parte vieja.

Parte de la muralla que rodea la parte vieja.

No conviene despedirse de Galisteo sin visitar su casco urbano, que se encuentra confinado por una muralla del siglo XV que lo rodea por completo. Mientras paseábamos por la muralla y justo cuando comentábamos que ya era demasiado tarde para que llegará Damia, allí que apareció, con su bici amarilla que ya estaba pidiendo descanso a gritos.

Durante la cena comentamos la etapa del día siguiente, en teoría será la más dura, es el paso a la provincia de Salamanca con la subida a puerto de Bejar. Antonio no deja de preguntar por el desnivel del puerto y el perfil de la etapa. Por lo menos hoy podemos descansar en un buen colchón y fresquitos.